El juez Stefan Mortensen sufre un accidente cerebrovascular mientras está en pleno juicio. Es internado en una residencia de ancianos, donde se le aloja en una habitación junto a un antiguo campeón de rugby. Mientras vive el día a día se fija en uno de los internos, Dave Crealy, que suele portar una marioneta hecha con una cabeza de muñeca sin ojos. Y comprueba que se dedica a abusar y torturar psicológicamente a los demás pacientes…

Dirección: James Ashcroft. Producción: Light in the Dark Productions. Productores: Catherine Fitzgerald, Orlando Stewart. Productores delegados: James Ashcroft, Emily Gotto, Eli Kent, Nicholas Lazo, John Lithgow, Geoffrey Rush, Samuel Zimmerman. Ayudante de producción: Letisha Tate-Dunning. Productora ejecutiva: Kayleighsha Wharton. Guion: Eli Kent y James Ashcroft, según el relato de Owen Marshall. Fotografía: Matt Henley. Música: John Gibson. Montaje: Gretchen Peterson. Diseño de producción: Zahra Archer. FX: Don Brooker (diseño de prótesis), Steve Ingram (supervisor de efectos especiales), Stan Alley (supervisor de efectos visuales). Intérpretes: John Lithgow (Dave Crealy), Geoffrey Rush (Stefan Mortensen), George Henare (Tony Garfield), Ian Mune (Howie Wicker), Thomas Sainbury (cuidador Mike), Maaka Pohatu (Dr Neels), Holly Shanahan (Madeline Shepard), Paolo Rotondo (psicólogo), Ginette McDonald (Sally Pile), Hilary Norris (Eunice Joyce), Anapela Polataivao (cuidadora Jasmine), Nathaniel Lees (Sonny Ausage), Nikki MacDonnell, Maaka Pohatu, Fiona Collins, Yvette Parsons, Nick Blake, Nathaniel Lees, Ariadne Baltazar, Hilary Norris, Holly Shanahan, Lutz Halbhubner, Ginette McDonald, Jane Waddell, Catie Noble, Hannah Lynch, Semu Filipo, Pilapitiya Rashmi, Sylvie Ashcroft… Nacionalidad y año: Nueva Zelanda 2024. Duración y datos técnicos: 104 min. – color – 1.85:1 – DCP Digital Cinema Package.

 

En tiempos el cine australiano y el neozelandés tuvieron una gran significación dentro del género fantástico y de terror, en concreto durante la década de los setenta. La ley de Jenny Pen (The Rule of Jenny Pen, 2024) se ambienta en la actualidad, puesto que son mencionados elementos como TikTok, pero ofrece un tono que parece remitir de forma constante a esa década, tanto en la textura fotográfica como en el estilo narrativo que le imprime su director, James Ashcroft. Con anterioridad este nos proporcionó un montón de cortos, un episodio de una serie televisiva y su debut como realizador de largos, Atrapados en la oscuridad (Coming Home in the Dark, 2021), que, tal como la presente, se basa en un relato de Owen Marshall, y que Ashcroft coescribió junto a Eli Kent. Su próxima película la está rodando en Estados Unidos, otra cinta de terror titulada The Whisper Man y protagonizada por Robert De Niro y Michelle Monaghan. Esperemos que no nos lo estropeen.

Se ha definido a La ley de Jenny Pen como una cinta de humor negro. Pero, aunque ofrece rasgos, este se halla inserto de un modo sutil y diríase que maquiavélico, no de un modo notorio y explícito. No te ríes en momento alguno; en cambio, sí inquieta de forma constante. John Ashcroft ha referido que la película trata en última instancia sobre la tiranía, y ha descrito la historia como el ascenso de un dictador en el lugar menos probable. Ese lugar es una residencia de ancianos, donde habita Dave Crealy, un anciano que porta una muñeca a modo de manopla, y que se relaciona con sus compañeros de una manera cada vez más desalmada. Se tiene camelado al personal de asistencia, puesto que es un hombre inteligente y retorcido. También es muy inteligente el juez que entra como nuevo paciente en el lugar, y tras observar sus maquiavélicas acciones intentará enfrentarse a él.

Protagonizada por John Lithgow y Geoffrey Rush en los dos cometidos referidos, la película representa un duelo interpretativo de primer orden. Solo por verles a ellos ya merece la pena verla, en versión original, por supuesto. Aunque la cinta fuera floja, sería recomendable. Pero es que además James Ashcroft la dirige con intensidad y nervio.

Ya hemos referido al inicio las texturas que Ashcroft aplica al filme, con una fotografía cálida y contrastada, de gran belleza en muchas ocasiones, que contrasta con la sordidez de lo que nos es narrado. A menudo emplea el enfoque y desenfoque como instrumentos para centrar la atención del espectador, planos muy cercanos de los rostros, o encuadres donde los personajes se hallan ubicados en la parte inferior del fotograma, amputados, con un gran espacio vacío por encima, mostrando techos inmensos. Ello facilita resaltar la soledad e indefensión a la que están sometidos los ancianos de la residencia. El realizador también emplea una técnica por la cual tengo especial predilección, como es la denominada split diopter, que consiste en mostrar en un mismo plano dos elementos distantes pero enfocados, y que utilizó en los setenta Brian De Palma, director que contó en variadas ocasiones con el actor John Lithgow. Quizás nada de ello sea casual, aunque Ashcroft no emplea el humor tan patente como lo hacía De Palma, ni tampoco la locura argumental, siendo más sobria en todos los aspectos.

Esa sobriedad es la que domina la cinta en su integridad, con esa lectura subterránea de humor malintencionado que se ha referido, pero con un tono angustiante que se va adueñando de la cinta de forma progresiva. Dave Crealy es un desequilibrado que no sabes por dónde va a salir, que tan pronto se parte de risa con un programa televisivo de David Attenborough, como se pone a bailar grotescamente… o entra en las habitaciones de los pacientes donde les somete a humillaciones contantes que van derivando en tortura psicológica… y física, hasta resultar sumamente incómodo.

Es un personaje que da miedo, por ese citado comportamiento incierto. Pero más miedo da todavía el entorno en que viven los ancianos de esa residencia, siempre solos, aunque estén rodeados del resto de compañeros. Los cuidadores les tratan con condescendencia, como mínimo, y percibimos un mundo en el que han sido alejados cuando ya nadie los quiere (apenas vemos visitas de familiares o amigos) y donde están vegetando hasta que dejen de existir. Un triste recordatorio de a dónde nos encaminamos todos. Mientras, James Ashcroft observa.

 

Anecdotario

  • El filme tuvo su premier en Estados Unidos el 19 de septiembre de 2024 en el Fantastic Fest, y en España el 10 de octubre de 2024 en el Festival de Sitges. En el primero Ashcroft fue premiado como mejor director, y en el segundo John Lithgow y Geoffrey Rush fueron galardonados como mejor actor en la Secció Oficial Fantàstic.
  • La película se rodó en Taupō, Wellington y Lower Hutt, Nueva Zelanda, en 2023. El complejo turístico Wairakei Resort, cerca de Taupō, se utilizó como escenario para la residencia de ancianos.

  • La muñeca está diseñada por Paul Lewis, quien en ocasiones la maneja.
  • Para añadir autenticidad a la película, todos los actores que interpretaban a cuidadores recibieron formación en un centro asistencial real, por ejemplo, sobre cómo hablar con los pacientes, cómo levantarlos con un arnés y cómo caminar con ellos.
  • Owen Marshall, autor del relato en que se inspira la película, aparece como extra en ella.
  • Estrenada en Nueva Zelanda el 20 de marzo de 2025 y en España el 12 de septiembre de 2025.

 

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: ***

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra