Frankenstein, auxiliado por el doctor Hertz, está experimentando sobre la permanencia del alma después de la muerte. También tiene un joven ayudante, Hans, enamorado de una muchacha llamada Christina, que sufre una malformación física. Una serie de desgracias en cadena conducen a que Hans sea ejecutado y Christina se suicide. Es el momento propicio para que el barón lleve a otro estadio sus experiencias.

Dirección: Terence Fisher. Producción: Hammer Films, Seven Arts Productions para Warner-Pathé Distributors. Productor: Anthony Nelson Keys. Guion: Anthony Hinds [acreditado como John Elder]. Fotografía: Arthur Grant. Música: James Bernard. Montaje: Spencer Reeve. Diseño de producción: Bernard Robinson. FX: Les Bowie (efectos especiales). Intérpretes: Peter Cushing (barón Frankenstein), Susan Denberg (Christina), Thorley Walters (doctor Hertz), Robert Morris (Hans), Duncan Lamont (el prisionero), Peter Blythe (Anton), Barry Warren (Karl), Derek Fowlds (Johann), Alan MacNaughtan (Kleve), Peter Madden (jefe de policía), Philip Ray (alcalde), Ivan Beavis (arrendador), Colin Jeavons (sacerdote), Bartlett Mullins (transeúnte), Alec Mango (portavoz), Stuart Middleton (Hans de niño), Nikki Van der Zyl (Christina [voz]), Jack Armstrong, Hyma Beckley, Daniel Brown, John Cam, Patrick Carter, Victor Croxford, Kevin Flood, Eric Henderson, Bill Hibbert, Lindsay Hooper, Lizbeth Kent, Howard Lang, Ricky Lansing, John Maxim, Mark McMullins, Cecil Paul, Fred Peck, Arthur Sandifer, Paddy Smith, Antony Viccars, Fred Wood… Nacionalidad y año: Reino Unido 1967. Duración y datos técnicos: 86 min. – color DeLuxe – 1.66:1 – 35 mm.

 

The Evil of Frankenstein [dvd/tv/bd: La maldad de Frankenstein, Freddie Francis, 1964] supuso una especie de reinicio de la saga de la creación de Mary Shelley, tras el díptico inicial. El final de The Revenge of Frankenstein [tv/dvd/bd: La venganza de Frankenstein, T. Fisher, 1958], con el barón convertido en su propia creación, dejaba las expectativas muy altas, las cuales se frustraron tras la nueva entrada al ciclo con el filme de Francis. El hecho de que, pese al protagonismo de Peter Cushing, aquélla fuera obra de otro realizador, podría semejar como si supusiera una entrega independiente de la serie principal. Aquí, sin embargo, esa desvinculación proseguía.

En realidad, lo que acabó convertido en Frankenstein Created Woman [tv/dvd/bd: Frankenstein creó a la mujer, 1967] fue concebido en un inicio justo después de Revenge, y el título, en aquel entonces And Frankenstein Created Woman, era un guiño a la película francesa Y Dios creó la mujer (Et Dieu… créa la femme, 1956), drama erótico dirigido por Roger Vadim y protagonizado por Brigitte Bardot, Curd Jürgens y Jean-Louis Trintignant. De hecho, existen referencias relativas a la intención en aquel entonces de contar con la Bardot en el papel del monstruo. Sin embargo, el proyecto fue apartado de los planes de la Hammer y, finamente, entró en producción bastantes años más tarde.

El 18 de abril de 1966 la Hammer encaró la producción de The Witches [tv/dvd/bd: Las brujas], de Cyril Frankel y, justo tras esta, vino Frankenstein Created Woman, que arrancó el 4 de julio[1]. Ahora, se recurre a dos de los guiones previstos para la inédita serie televisiva Tales of Frankenstein[2], uno debido a A. R. Rawlinson[3] y otro a Edward Dryhurst[4], y Anthony Hinds, escudado en su habitual seudónimo como guionista de John Elder, abordó la labor de adaptarlos al formato de un largometraje. Y no puede decirse que el trabajo de Hinds/Elder resulte muy distinguido, la verdad.

Muestra interés el hecho de que un científico como Frankenstein, un cirujano, se plantee cuestiones metafísicas, en concreto sobre la pervivencia del alma más allá del cuerpo. Y también se vuelve a desarrollar cierto planteamiento recurrente en el ciclo, como son las dudas existenciales de la criatura. Aquí, tras «resucitar», el ente Christihans pregunta repetidamente al barón «¿Quién soy?», mirándose indeciso en el espejo que le suministra el doctor Hertz.

Pero, aparte de eso, la labor de Hinds es terriblemente prosaica. Frankenstein es dado de lado en muchos momentos, y la historia principal parece ser la que protagonizan Christina y Hans, dos personajes repudiados por una sociedad que los ve como seres inferiores. Christina es una muchacha con una deformidad en medio rostro, y en esa misma mitad del cuerpo tiene un brazo y una pierna atrofiados. Hans es hijo de un asesino, ajusticiado en la guillotina —muchos años después de esa ejecución, la guillotina sigue en las afueras del pueblo, como una señal de una sentencia irremisible—, y de continuo se le echa en cara sus orígenes, justificando el estúpido dicho «De tal palo, tal astilla».

Así, el guion se constituye en una estructura causa-efecto por medio de un mecanismo machacón, sin un ápice de originalidad ni de osadía, y se muestra una lucha de clases de lo más convencional, con un trío de «niños de papá» malcriados, caprichosos y egoístas que tienen mucho más de dandis británicos que de señores centroeuropeos.

Lo curioso del caso es que Fisher parece aburrirse del guion que le ha caído entre manos, y hay pocos momentos donde se digne brillar por encima de este. El genial director se definió enemigo del zoom, sin embargo aquí lo aplica en varias ocasiones, y de un modo contundente, aunque cabe referir que no está mal empleado del todo. Algún encuadre ocasional, alguna elipsis, o el juego de luces cuando Christine está en la carnicería con el hacha de cocina, son momentos que destacan por encima de un desarrollo formulario y sin vida.

Las implicaciones del guion, por otra parte, son esquivadas de forma pudorosa, y el que el espíritu de un hombre habite en el cuerpo de una mujer se obvia en todo momento. Aquí solo tenemos a una mujer que es utilizada como método de venganza por parte de un hombre cuyo espíritu parece flotar por encima de ella, sin integrarse físicamente en el cuerpo donde, recordemos, fue introducido —en una escena de creación que nos es escamoteada—. De ahí que a veces oigamos la voz masculina desde fuera de ella, y el espíritu, de algún modo, pervive en la cabeza amputada que ella lleva consigo a todas partes (aunque este elemento proporciona al filme un tono grotesco muy sugerente).

Peter Cushing, como es obvio, hace una interpretación colosal, aunque el personaje, de manera paulatina, ha ido perdiendo acidez y maldad. Aquí parece un aprovechado que se sirve del pánfilo del doctor Hertz (un adecuado Thorley Walters), y que, en lo que respecta a los sentimientos de Hans y Christina, parece sencillamente no pensar en ellos, acaso porque está demasiado concentrado en cuestiones metafísicas que le impiden aproximarse a cuestiones más terrenales. Y, curiosamente, se nos muestra al barón con algún tipo de lesión en las manos, siempre enfundadas en guantes, lo cual le impide operar por sí mismo, y necesitado por tanto de un ayudante (algo que, por lo demás, siempre ha tenido). El motivo de esa lesión no es explicado en momento alguno. En definitiva, el nivel de la película sube ligeramente con respecto a la entrega anterior, pero está lejos de las dos portentosas primeras muestras.

 

Anecdotario

  • Título de rodaje: And Frankenstein Created Woman. Título alternativo: Frankenstein Made Woman.
  • Título en Colombia, México, Uruguay y Venezuela: Y Frankenstein creó a la mujer.
  • Presupuesto: 138.000 libras esterlinas.
  • Rodada entre el 4 de julio y el 12 de agosto de 1966, en los Bray Studios, en Down Place, Oakley Green, Berkshire, Inglaterra, así como en Frensham Common, Surrey, Inglaterra, Reino Unido (escena de la guillotina) y en Black Park, Iver Heath, Buckinghamshire, Inglaterra (escenas en el bosque).
  • El futuro actor Christopher Neame participa aquí como tercer ayudante de dirección.
  • Susan Denberg era una modelo austriaca que había sido Miss Agosto en la revista Playboy tras aparecer en el thriller estadounidense Esclavos del pecado (An American Dream / See You in Hell, Darling, Robert Gist, 1966). La prepublicidad de la Hammer mostraba a Denberg en bikini junto al equipo de laboratorio de The Evil of Frankenstein.
  • Al ser interrogado por la policía, Frankenstein dice que es doctor en Medicina, Física y Derecho.

  • En el primer borrador del guion, el personaje de Christina se llamaba Maria (¿guiño a Metrópolis de Fritz Lang?).
  • Nunca se dice en qué país está ambientada la película, pero el escudo de armas del vehículo es el del cantón de Berna, en Suiza.
  • El barón Frankenstein aquí experimenta con la transferencia del alma de un cuerpo a otro. Era una tentativa habitual de los alquimistas del siglo XVII, incluido Konrad Dippel, el alquimista real nacido en el castillo Frankenstein que supuestamente inspiró a Mary Shelley.
  • Cuarta película de la saga Frankenstein de la Hammer; después vino El cerebro de Frankenstein (Frankenstein Must Be Destroyed, T. Fisher, 1969).
  • La película se estrenó en programa doble con The Mummy’s Shroud [vd/tv/dvd/bd: El sudario de la momia, John Gilling, 1967].
  • Estrenada en el Reino Unido el 18 de junio de 1967. En España quedó inédita en salas comerciales, y luego se vio por televisión el jueves 28 de agosto de 1983, en TVE, y luego se editó en DVD en enero de 2003, por parte de Manga Films, en una colección dedicada a la Hammer.

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: **½

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra

 

[1] Después se abordaría The Mummy’s Shroud vd/tv/dvd/bd: El sudario de la momia, John Gilling, 1966], con la cual originalmente se estrenó la presente en el Reino Unido, en programa doble. Ambas, clasificadas «X».

[2] Habiendo visto el episodio piloto, que circula por Internet, y especulando sobre cómo serían originalmente los tres episodios que dieron lugar a estas dos películas, se podría conjeturar sobre una serie donde distintos doctores Frankenstein (interpretados por diferentes actores) planteaban historias paralelas sobre su personalidad y su trabajo. La idea de la serie surgió por parte de Michael Carreras mientras Jimmy Sangster escribía el guion de The Revenge of Frankenstein. Carreras pidió participar a Sangster, quien proporcionó un libreto llamado «The Single-Minded Blackmailer», así como un esquema de la serie en su conjunto, que incorporaba el vudú, las mutaciones y la criogenia como algunas de las aventuras a desarrollar. Se pretendía rodar ocho episodios de media hora, la mitad en el Reino Unido y la otra en Hollywood (era en colaboración con Columbia–Screen Gems). Los guionistas elegidos por Hinds fueron A. R. Rawlinson, Hugh Woodhouse, Cyril Kersh, Edward Dryhurst y el operador de cámara Peter Bryan.

[3] Veterano guionista, que debutara en 1932, participó en El hombre que sabía demasiado (The Man Who Knew Too Much, 1934) de Hitchcock, así como en The Face at the Window (George King, 1939), una de las más recordadas cintas del mítico Tod Slaughter, o Luz de gas (Gaslight, Thorold Dickinson, 1940). Hacia 1954 comenzó a participar abundantemente en televisión, y también colaboró en un par de muestras antiguas de la Hammer. Según el guion de Rawlinson para la serie, el barón crea una mujer llamada Lisa, perfecta de cuerpo y mente, pero sin emociones ni alma, un vacío que es llenado por el mal.

[4] Su carrera en cine se circunscribió entre 1929 y 1957, con un historial poco significativo, del que se puede destacar, por haber sido vista en su día en nuestro país, El caso de la señorita asustada (The Case of the Frightened Lady, G. King, 1940). En su aporte para la serie, su idea central era el empleo del frío extremo como medio para mantener la vida en suspensión, con dos ayudantes llamados Hans y Carl.