A partir de un fragmento inacabado del legendario Robert E. Howard, el autor Ángel L. Chinea acomete una obra de expansión literaria tan fiel como poderosa, en la que no solo honra al maestro de la fantasía heroica, sino que eleva su legado con una novela de aliento épico, densidad lírica y reverencia creativa. Esta historia, concebida como una continuación espiritual de la saga de Solomon Kane, devuelve al puritano justiciero al centro de una lucha brutal entre el bien y el mal.

Solomon Kane regresa a Inglaterra tras años de errancia por tierras extrañas, impulsado por una sucesión de sueños proféticos en los que una entidad de luz le advierte sobre una presencia demoníaca en el corazón de Londres. Esa entidad no es sino el reflejo de una verdad inminente: el Ángel de las Tinieblas —conocido por incontables nombres: Lucifer, Satán, el Príncipe de todos los demonios— ha cruzado el umbral del mundo y prepara su ascenso definitivo. Sin embargo, la bestia, el Maligno, bajo la pluma de este autor, no es la figura arquetípica que tantos otros han retratado en incontables obras de ficción: es algo más.

En compañía de John Silent, el bucanero, un viejo aliado que también surgiera del imaginario de Howard, Kane se adentra en los oscuros subsuelos de la Torre Negra, en el páramo solitario, donde moran los acólitos inmortales del demonio: guerreros de todas las épocas, resucitados y preservados por una voluntad infernal para servir en el último alzamiento. Allí, en estancias olvidadas por el tiempo, se libra una batalla feroz y sangrienta que culmina en un duelo final entre Kane y la encarnación misma del Mal.

Ángel L. Chinea, con voz propia y guiado por el mismo pulso narrativo que el de Howard, nos entrega una novela que respira solemnidad, violencia redentora y un heroísmo incorruptible. Una obra épica que recoge la herencia de la espada y brujería en toda su grandeza, y la proyecta hacia una dimensión nueva, donde la fe, la valentía y el acero se enfrentan al más antiguo de los enemigos

Esta nueva versión de Redflame, revisada y ampliada, tiene novedades interesantes. Vamos, que si te has leído la anterior edición, no te creas que te vas a librar de una nueva experiencia. El autor no solamente ha realizado una revisión de la obra para pulir lo que, para muchos, ya era un trabajo profesional. Incluye una buena colección de nuevas y magníficas ilustraciones en cada capítulo, clarifica algunos pasajes referentes a la vida de Solomon Kane, ha redactado un capítulo entero nuevo, e incluso ha trabajado en el orden de los capítulos para una lectura todavía más perfecta, si cabía. Vamos una gozada.

Aparte de estos nuevos añadidos, también contiene una Prefacio escrito por el autor sobre la obra, y un prólogo de Xavier Marturet.