Los médicos no son capaces de diagnosticar un extraño bulto que le ha aparecido a Karen en la nuca, aunque el doctor Hughes asegura que semeja un feto. Karen transmite sus temores a Harry, una antigua pareja suya, y que trabaja echando el tarot. Tras una serie de extraños eventos, Harry está seguro de que en la nuca de Karen está creciendo la reencarnación de un antiguo hechicero indio malvado, y para combatirlo habrá de buscar otro hechicero.
Dirección: William Girdler. Producción: Mid-America Pictures, Simon Productions, Manitou Productions Ltd., Hollywood West Entertainment, Melvin Simon Productions para Avco Embassy Pictures. Productor: William Girdler. Productores delegados: Melvin G. Gordy, David Sheldon, Melvin Simon, Herman Weist. Productores asociados: Jon Cedar, Scott M. Siegler, Gilles de Turenne. Guion: William Girdler, Jon Cedar, Thomas Pope, según la novela de Graham Masterton. Fotografía: Michel Hugo. Música: Lalo Schifrin. Montaje: Bub Asman. Diseño de producción: Walter Scott Herndon. FX: Thomas R. Burman, Joe McKinney (efectos de maquillaje), Gene Grigg, Tim Smythe, Richard Edlund (efectos mecánicos), Dale Tate, Frank Van der Veer (supervisores de efectos ópticos). Intérpretes: Tony Curtis (Harry Erskine), Michael Ansara (John Singing Rock), Susan Strasberg (Karen Tandy), Stella Stevens (Amelia Crusoe), Jon Cedar (Dr. Jack Hughes), Ann Sothern (Mrs. Karmann), Burgess Meredith (Dr. Snow), Paul Mantee (Dr. McEvoy), Jeanette Nolan (Mrs. Winconis), Lurene Tuttle (Mrs. Herz), Hugh Corcoran (MacArthur), Anne Newman Bacal [acreditada como Ann Newman-Mantee] (enfermera del 10º piso), Jan Heininger (Wolf, un enfermero), Michael Laren (Michael, un enfermero), Cindy Stanford (vecina), Tenaya Torres [acreditada como Tenaya] (Mrs. Singing Rock), Carole Hemingway (vecina), Beverly Kushida (enfermera del piso 16), Charles Kissinger (anestesiólogo), Michael Andreas (médico en sala de operaciones), Mick Dyrenforth (médico en sala de operaciones), Loren Elaine (enfermera en sala de operaciones), Felix Silla (Misquamacus), Joe Gieb (Misquamacus), Joe Dorsey (Dr. Snaith)… Nacionalidad y año: Estados Unidos 1978. Duración y datos técnicos: 99 min. color 2.35:1.
Manitu (o Gitchi Manitou, Gitchie Manitou, Gitchee Manitou, Kitche Manitou; Gichi-manidoo), en la cultura tradicional algonquina, es el Gran Espíritu, el Creador de todas las cosas y el Dador de Vida. «Manitu» es una palabra algonquina que significa «espíritu», y «Gitche Manitou» significa «Gran Espíritu». Su significado real es más cercano a «Gran Conexión». Los exploradores franceses traducían el término como «Gran Manitou».
De la Wikipedia española
Estados Unidos es un país muy joven, sin apenas historia, pero que la ha explotado notoriamente en su cine, repitiendo hasta la saciedad eventos concretos una y otra vez. Los verdaderos aborígenes americanos, los indios, por lo general han sido tratados en el cine del Oeste, y no siempre de una manera positiva, aunque conviene destacar que el wéstern pro indio no es algo de ahora, y que lleva haciéndose desde la época del cine mudo. La mitología propia del pueblo indio, sin embargo, ha sido muy poco tratada en el séptimo arte, y hay unos pocos ejemplares durante la etapa precisamente del cine silente ―muchos de ellos desaparecidos―, y se pueden también referenciar títulos más recientes como El oro de Mackenna (Mackenna’s Gold, J. Lee Thompson, 1969) o Chikara (The Shadow of Chikara, Earl E. Smith, 1977), por citar unos pocos ejemplos.
Graham Masterton (nacido en Edimburgo en 1946) es un prolífico y prestigioso escritor británico[1] que debutó con Manitú (The Manitou, 1975), primera novela de una saga referente a un hechicero indio de cuatrocientos años que intenta retornar en el mundo civilizado actual, llamado Misquamacus, y conectado con los Mitos de Cthulhu. Leí el libro hace mucho, y apenas recuerdo nada, salvo que, cuando vi la película de estreno, eché de menos las alusiones lovecraftianas que tenía la novela. Avco Embasy compró los derechos de la obra a Masterton por cincuenta mil dólares, y como director tenemos a William Girdler, quien también ejerce como productor y coguionista. Girdler (1947-1978) había debutado en la dirección con el film de terror Three on a Meathook (1972), y a lo largo de su carrera realizó tres películas policiales y seis de terror, siendo la presente la última. Murió en Manila (Filipinas) el 21 de enero de 1978, tres meses antes del estreno de The Manitou, en un accidente de helicóptero, mientras buscaba localizaciones para su nueva película, titulada Overlords. En ese lapso, se le había reconocido un prestigio, y era capaz de sacar muy buen provecho a sus escasos presupuestos, siendo Retorno desde la quinta dimensión su proyecto más caro hasta el momento. Quién sabe qué futuro le habría deparado el cine si no hubiese fallecido.
El film se beneficia, particularmente, por el contraste que se ofrece entre la temática de las viejas leyendas indias y su ambientación en un moderno edificio hospitalario de San Francisco, donde tiene lugar gran parte de la trama. Es la suma de contrastes lo que le confiere su característica singularidad. Otro elemento destacado es su peculiar reparto, compuesto de viejas glorias, a saber Tony Curtis, Michael Ansara, Susan Strasberg, Stella Stevens, Ann Sothern, Burgess Meredith y Jeanette Nolan, lo cual le hace semejar uno de esos típicos telefilmes de terror dirigidos cinco años antes por gente como Curtis Harrington o Dan Curtis. Y algo de eso tiene, por su aire trasnochado, por el tono desinhibido con el que plantea una trama algo descabellada y por los modos un tanto caseros de su resolución, pese al acento lujoso que brinda el formato panorámico.
A Tony Curtis, en su única película de terror sobrenatural[2] hasta el momento[3], se le ve un tanto perdido, algo que sucede exactamente lo mismo con su personaje, lo cual es útil para la desvinculación con su entorno que precisa la narración. El actor interpreta a Harry Erskine, un embaucador echador del Tarot, que se dedica a estafar a ancianas ricas y tontas, y que de súbito se encuentra con un hecho sobrenatural auténtico. En su investigación para ayudar a su amiga Karen ―no se dice en ningún momento, pero se percibe que fueron pareja en un tiempo pasado, o incluso tal vez que están divorciados, aunque aún hay algo que pervive entre ellos, en especial por parte de él― entra en contacto con diversas amistades conectadas con el mundo de lo esotérico, en especial una Stella Stevens agitanada que es una médium que parece auténtica, y que realizará una sesión de espiritismo que destaca por su adecuada atmósfera. Esa escena podría decirse que es lo esperable en un film de estas características, con todo. Lo interesante viene cuando comienza a plantearse esa mitología india, con la comparecencia final del actor Michael Ansara como John Singing Rock, un hechicero indio[4], que aceptará participar en su lucha contra un hechicero centenario de poderes terribles. El actor ofrece una interpretación excelente.
La batalla se desatará, pues, en la planta décima de un moderno hospital, con Karen alojada en una habitación donde la espalda cada vez se le deforma más, hasta que esta se desgarra y da a luz a un hechicero, en unos efectos bastante bien conseguidos. Menos convicción ofrece ese lagarto gigante sobreimpresionado, y que se percibe es un actor disfrazado, el decorado del pasillo helado ―aunque la idea es muy atractiva―, con una resolución que canta a cartón piedra, o los primitivos efectos visuales de la batalla final. Empero, eso confiere al film una textura de serie B agradecida.
William Girdler aporta una narración franca y enérgica, que remite un tanto, en particular en su inicio con el cónclave de médicos, a El exorcista (The Exorcist, William Friedkin, 1973), y en cierta manera The Manitou es una relectura de esta, con el hechicero indio poseyendo a la paciente, y la aparición final del que, en el guion, es denominado Satán, «o llámesele por cualquier otro nombre». Resulta un tanto sorprendente lo rápido que es convencido el médico de la condición sobrenatural de lo que acontece, y ello sin duda es debido a la celeridad con que es narrado todo, sin tiempo para el descanso, que conduce a un film muy entretenido, cuyo metraje avanza sin apenas percibirse, y que representa ese típico cine de serie B que en la época aún podía ser disfrutado en pantalla grande, y que por desgracia ya se ha perdido.
Anécdotas
- Título en Argentina: Manitou. Título en México: El Manitou.
- En 1979, la Academy of Science Fiction, Fantasy & Horror Films nominó la película en las categorías de mejor actor de reparto (M. Ansara) y maquillaje.
- Rodada con un presupuesto estimado de tres millones de dólares.
- Se refiere que el guion fue escrito por sus tres autores en tres días.
- Para interpretar a Misquamacus fueron requeridos dos actores con enanismo, Felix Silla y Joe Gieb. El primero es famoso sobre todo por interpretar al primo Itt en la serie La familia Addams de los sesenta, a Lucifer en la serie antigua de Galáctica y a Twiki en la de Buck Rogers, así como al emperador pingüino de Batman vuelve. El segundo debutó con la presente, y ha tenido una carrera menos destacada, apareciendo, por ejemplo, en el episodio piloto de Star Trek: la nueva generación, como el que toca el gong ante el paso de Q.
- En Alemania, traducido, adoptó el título de «Super Zombie: El nacimiento del terror».
- Estrenada en Estados Unidos el 28 de abril de 1978. En España se estrenó el 23 de noviembre de 1979, en Madrid, en el cine Madrid-2.
Bibliografía
Manitú; por Graham Masterton; traducción sin consignar. Ediciones Sedmay, 1977. Colección: Libro revista semanal; s/n. T.O.: The Manitou (1975).
La novela es la primera de una saga, formada también por: Revenge of the Manitou (1979), Burial (1991), «Spirit Jump» (relato incluido en Faces of Fear (1996), Manitou Blood (2005), Blind Panic (2009) y Plague of the Manitou (2015). El personaje de Harry Erskine también aparece en The Djinn (1977), que no forma parte de la serie.
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: ***
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra
[1] Pese a ello, en España solo se le han publicado dos novelas, una antología de relatos y cuentos dispersos en un puñado de antologías. Sin embargo, es el único escritor no francés en ganar el prestigioso premio Julia Verlanger de ese país; en Bélgica se concede anualmente un premio con su nombre a la mejor novela y relato de terror escritos en francés del año; y tiene un premio Edgar por parte de la Mystery Writers of America, una medalla de plata concedida por la West Coast Review of Books y en 2019 recibió un premio a toda su trayectoria por parte de Horror Writers’ Association. Algo parece no funcionar en el mundo editorial español.
[2] También participó en un pequeño cameo sin acreditar en La cámara de los horrores (Chamber of Horrors, Hy Averback, 1966), así como en La semilla del diablo (Rosemary’s Baby, Roman Polanski, 1968), donde es la voz de un actor que habla con Mia Farrow por teléfono.
[3] Después aparecería en absurdeces como Lobster Man from Mars [vd: El hombre langosta, Stanley Sheff, 1989], Midnight (Norman Thaddeus Vane, 1989) o The Mummy Lives [vd: El misterio del sarcófago, Gerry O’Hara, 1993].
[4] En realidad, Michael Ansara era de origen asirio. Estuvo a punto de rechazar el papel cuando se enteró de que, con anterioridad, su cometido había sido ofrecido a un indio auténtico, y este lo había rechazado a su vez, pero como tenía problemas económicos en esa época terminó aceptando.